La naturaleza ofrece a veces espectáculos que parecen salir de la mente de un gran coreógrafo. Los eclipses de cuerpos astronómicos –posibles gracias a improbables juegos de órbitas, tamaños y distancias- se encuentran entre los más bellos. Si a ellos se añade una orografía mejor que cualquier decorado, el resultado maravilla al espectador afortunado. 
En la Isla de Tenerife, con las condiciones meteorológicas adecuadas, se puede observar la sombra del Teide proyectada sobre la atmósfera terrestre a la salida y a la puesta del Sol. En caso de haber Luna llena, ésta prácticamente se “sienta” sobre la sombra como un adorno encima del abeto navideño tradicional. ¿Qué ocurre si tiene lugar un eclipse total de Luna coincidiendo con ese momento? Pues lo que se podrá ver a las 7.40 horas de la mañana de este martes en Tenerife pocos minutos antes de la salida del Sol: la Luna eclipsada coronando la sombra del Teide. También será posible disfrutarlo a través del ordenador pues hay una retransmisión en directo (cuenten una hora más tarde en la Península por la diferencia horaria). Por si hay mala suerte con el tiempo, o para amenizar la espera, aquí tienen una fotografía tomada en circunstancias parejas hace diez años.
Dicho esto, los eclipses de Luna son visibles en cualquier sitio en el que la Luna esté por encima del horizonte cuando tienen lugar. El de mañana se observará en Norteamérica, el este del Pacífico, el noroeste de Sudamérica y Europa occidental. 

Créditos imagen:
La sombra del Teide apunta a la Luna eclipsada en el atardecer del día 9 de enero de 2001. Foto: L.M. Chinarro

Más información:
Retransmisión en directo del eclipse
Después de una década, el eclipse del próximo martes volverá a alinear la sombra del Teide y la luna eclipsada
La sombra de la Tierra recorre la Luna

Comentarios (0)

Compartir:

El autor

Annia Domènech es Licenciada en Biología y Periodismo. Periodista científico responsable de la publicación caosyciencia.

Un ciclón de cinco años en Saturno

Ángel Gómez Roldán / 18-12-2010

La gran mancha roja de Júpiter, una enorme tormenta anticiclónica en la atmósfera del planeta gigante, se lleva observando de manera ininterrumpida desde hace más de trescientos años. Los anticiclones son perturbaciones atmosféricas cuyos vientos giran en sentido contrario a la rotación de un planeta y suelen ser muy estables en el tiempo, como es el caso de la enorme tormenta de Júpiter, tres veces mayor que la Tierra.
Mucho más efímeros son los ciclones, en los cuales los vientos se mueven en la misma dirección que la del giro del planeta. Un ciclón en Saturno de más de cinco años de longevidad ha batido todos los récords hasta el momento en los dos planetas gigantes del Sistema Solar. Este ciclón, de un tamaño similar al continente europeo, fue estudiado entre los años 2004 y 2009 por un equipo de investigadores de la Universidad del País Vasco, liderados por Teresa del Río-Gaztelurrutia, utilizando las imágenes de la sonda espacial Cassini. Los científicos están a la espera de los datos de 2010 para conocer cómo evoluciona este perdurable ciclón del planeta anillado.

Créditos imagen: En esta imagen de Saturno tomada por la sonda Cassini se señala con una flecha el ciclón de más de cinco años de edad seguido por los investigadores vascos. (Cassini-ISS/del Río-Gaztelurrutia et al.)

Más información:

Detectan un ciclón de más de cinco años de vida en Saturno

Comentarios (0)

Compartir:

El autor

Ángel Gómez Roldán es Divulgador científico especializado en astronomía y ciencias del espacio, y director de la revista "AstronomíA".

Los estallidos de rayos gamma se encuentran entre los fenómenos más energéticos del Universo. Sin embargo, algunos de ellos son en luz visible sorprendentemente débiles en intensidad: son los llamados estallidos oscuros de rayos gamma. Esta aparente incongruencia no es tal, según ha revelado un estudio llevado a cabo con el instrumento GROND del telescopio de 2,2 metros MPG/ESO  en el Observatorio de La Silla (Chile). Lo tenue de su radiación se explica por una combinación de factores, el más importante de los cuales es la existencia de polvo entre el lugar de la explosión y la Tierra, donde están los científicos que intentan comprender este fenómeno.

Créditos imagen: Visión de artista de un estallido oscuro de rayos gamma en una zona de formación estelar. - ESO/L. Calçada

Más información:
Se hace la luz sobre los estallidos oscuros de rayos gamma
El puzzle de las explosiones de rayos gamma

Comentarios (1)

Compartir:

El autor

Annia Domènech es Licenciada en Biología y Periodismo. Periodista científico responsable de la publicación caosyciencia.

Sale el Sol de los últimos quince años

Annia Domènech / 15-12-2010

La Agencia Europea del Espacio (ESA) ha puesto a disposición de los internautas todas las imágenes obtenidas por el observatorio espacial SoHO (Solar and Heliospheric Observatory), más de un millón en total. A ellas se suman diariamente las que toma SDO (Solar Dynamics Observatory), de NASA, lanzado a comienzos de año.  
Para "jugar" con ellas es necesario descargarse el programa JHelioviewer, una aplicación en Java desarrollada como parte del proyecto Helioviewer de NASA y ESA. El usuario no sólo puede ver imágenes de nuestra estrella, también puede colorearlas y procesarlas en tiempo real, así como crear sus propios vídeos. Se trata de un archivo visual interactivo que va, seguro, a fascinar a los forofos de la Astronomía en general y del Sol en particular.

Créditos imagen: Captura de pantalla del programa JHelioviewer, desarrollado por ESA. La imagen solar fue tomada por SDO (NASA). Muestra una protuberancia suspendida sobre la superficie del Sol. - ESA JHelioviewer Team

Más información:
ESA makes the Sun available to everyone
JHelioviewer
"Con SDO obtenemos una visión global del Sol que no se había logrado antes"

Comentarios (0)

Compartir:

El autor

Annia Domènech es Licenciada en Biología y Periodismo. Periodista científico responsable de la publicación caosyciencia.

Nuevo hito para el Voyager 1

Ángel Gómez Roldán / 14-12-2010

Después de más de 33 años de viaje y unos 17.000 millones de kilómetros recorridos, la venerable sonda espacial Voyager 1, que visitó los planetas Júpiter y Saturno en 1979 y 1980, está mandando datos que parecen confirmar que está llegando a la frontera de nuestro Sistema Solar. Según informa la NASA, la Voyager 1 ha entrado en una región del espacio donde la velocidad del viento solar, la emisión de partículas cargadas emitidas por el Sol, ha disminuido prácticamente a cero. En el año 2007, la velocidad del viento solar registrada por los instrumentos de la sonda era del orden de los 210.000 km/h. Desde entonces y hasta ahora, esta velocidad ha ido disminuyendo paulatinamente a razón de unos 72.000 km/h al año. Así, el pasado mes de junio de 2010, la velocidad del viento solar registrada ya era casi nula. Los investigadores han continuado las medidas durante varios meses para corroborar el fenómeno, seguramente debido a que el viento interestelar es ya lo suficientemente potente como para frenar la emisión de partículas del lejano Sol. Se estima que en apenas tres o cuatro años más, la Voyager 1 –que sigue moviéndose a más de 60.000 km/h– cruzará la heliopausa, el límite de la influencia del Sol en el medio interestelar, y se adentrará en el auténtico espacio entre las estrellas.

Créditos imagen: Impresión artística de la sonda interplanetaria –ya “casi” interestelar– Voyager 1. (NASA)

Más información:
NASA's Voyager 1 Spacecraft Nearing Edge of the Solar System

Comentarios (0)

Compartir:

El autor

Ángel Gómez Roldán es Divulgador científico especializado en astronomía y ciencias del espacio, y director de la revista "AstronomíA".