El medio ambiente se vuelve azul

Annia Domènech / 06-04-2011

Puede semejar extraña esta  afirmación, y de hecho lo es. Un título tan bonito es cierto únicamente si se utiliza el código de colores de la Ecología, cuyos investigadores describen la rapidez a la que las poblaciones de seres vivos y el medio ambiente cambian en el tiempo con un color espectral.
El rojo simboliza que cada vez hay menos variación (como en la temperatura de los océanos) mientras que el azul identifica lo contrario (un ejemplo es la temperatura del aire). Las teorías existentes indicaban que el color espectral del medio ambiente influiría en el de las poblaciones de animales. Por primera vez, según publica el Journal of Animal Ecology, los datos avalan esta hipótesis. Han sido obtenidos mediante el análisis de la evolución de 147 especies de pájaros, mamíferos, insectos, peces y crustáceos, así como de la temperatura, a lo largo de los últimos treinta años
Los investigadores indican que los cambios en el “color” del medio ambiente muestran un paralelismo con el de las poblaciones animales. También han encontrado que el medio ambiente se está volviendo azul, es decir, fluctúa con mayor rapidez con el paso del tiempo.  Esto podría ser debido al cambio climático.

Créditos imagen: Azul - Uso libre

Más información:
British Ecological Society

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El autor

Annia Domènech es Licenciada en Biología y Periodismo. Periodista científico responsable de la publicación caosyciencia.

Gracias a las observaciones del Telescopio Espacial Hubble, los astrónomos han podido recalcular la velocidad de expansión del Universo con una precisión sin precedentes. La investigación liderada por Adam Riess de la Johns Hopkins University (EE.UU.) ha permitido determinar una imagen de la actual tasa de expansión del Universo con una incertidumbre de solo el 3,3 %, reduciendo el margen de error en un 30 % respecto a la anterior medida del año 2009. La velocidad de expansión sería de 73,8 kilómetros por segundo por megapársec. Esto es, cada millón de pársec adicional (3,26 millones de años luz) que una galaxia dista de la Tierra, la galaxia parece estar viajando 73,8 kilómetros por segundo más rápido alejándose de nosotros.
Cada aumento en la precisión de este dato ayuda a consolidar nuestro conocimiento de los ingredientes cósmicos. Permite restringir el rango del valor de la energía oscura y ayuda a los astrónomos a reforzar sus estimaciones de otras propiedades cósmicas, incluyendo la forma del Universo y la cantidad de neutrinos que poblaban el Universo primitivo.

Créditos imagen: Imágenes como esta de la galaxia NGC 5584 tomada por la cámara WFC3 acoplada al Telescopio Espacial Hubble permiten medir con mayor precisión las estrellas variables Cefeidas y las supernovas de tipo Ia. Estos marcadores de distancias cósmicas mejoran la comprensión del Cosmos. En esta galaxia se han medido 250 Cefeidas. (NASA, ESA, A. Riess –STScI/JHU–, L. Macri –Texas A&M University– y el Hubble Heritage Team –STScI/AURA–)

Más información: NASA's Hubble Rules Out One Alternative to Dark Energy.

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El autor

Ángel Gómez Roldán es Divulgador científico especializado en astronomía y ciencias del espacio, y director de la revista "AstronomíA".

La pareja de galaxias interactuante NGC 6872 e IC 4970

Ángel R. López Sánchez / 04-04-2011

Pareja de galaxias NGC 6872 e IC 4970 con Telescopio Gemini Sur

En algún lugar de la constelación austral del Pavo, a unos 200 millones de años luz de distancia de nosotros, se encuentra una curiosa galaxia alargada denominada NGC 6872. Se trata de una galaxia espiral barrada con dos brazos espirales extraordinariamente separados. Tanto es así que es una de las galaxias espirales más elongadas que se conocen: de un extremo al otro de la galaxia se abarcan 410,000 años luz, casi 4 veces el tamaño de nuestra Vía Láctea. Dicho de otra forma, con menos de 6 galaxias como NGC 6872 se completaría la distancia entre la Vía Láctea y la galaxia de Andrómeda. NGC 6872 no es un objeto aislado: posee una galaxia compañera enana, IC 4970, por lo que algunos astrónomos han sugerido que la interacción entre ambos objetos es la responsable de la peculiar estructura del sistema. Gracias a unas nuevas observaciones realizadas con el telescopio de 8 metros Gemini Sur (Chile) los astrónomos han podido conseguir una visión clara de lo que está ocurriendo en esta pareja de galaxias. La colorida imagen que enseñamos aquí muestra claramente los elongados brazos espirales de NGC 6872 y la galaxia enana compañera IC 4970 (abajo a la derecha del centro de la galaxia principal), revelando multitud de detalles entre ambas galaxias. En particular, destacan las líneas de polvo oscuro a lo largo de los brazos espirales y el color rojizo indicador de estrellas viejas en el centro de NGC 6872. Sin embargo, la nueva imagen ha revelado centenares de regiones azules en los brazos espirales: son cúmulos de estrellas jóvenes y masivas que se han creado muy recientemente. Estos cúmulos estelares aparecen también entre los núcleos de las dos galaxias, indicando que en efecto ambos cuerpos están en interacción. Es precisamente la interacción gravitatoria entre NGC 6872 e IC 4970 la que ha disparado la formación estelar en el sistema y la causante de la gran distorsión que están sufriendo los brazos espirales de la galaxia principal. Dentro de centenares de millones de años los dos objetos se fusionarán en uno sólo, formando finalmente una única galaxia masiva y con poca formación estelar.

Curiosamente, en esta primera etapa del proceso de fusión no es la galaxia pequeña IC 4970 la que sale más perjudicada, sino la galaxia principal NGC 6872. La razón es la fuerte distorsión gravitatoria que NGC 6872 está experimentando. Además, IC 4970 le está robando material, tanto gas como estrellas. La nueva imagen muestra cúmulos de estrellas jóvenes entre las dos galaxias, en regiones que antes no se conocían, además de revelar algunas estructuras sutiles de estrellas más viejas conectando las dos galaxias. Otra de las evidencias a favor de la caída de material robado de NGC 6872 a IC 4970 es la detección de una fuente intensa de rayos X en la galaxia enana, que se cree es consecuencia de un agujero negro que es alimentado por el gas robado de NGC 6872.

La idea de la observación de esta pareja de galaxias no proviene de un grupo de astrofísicos sino de una clase de secundaria de un colegio de Sídney (Australia). Como parte de un proyecto de divulgación y enseñanza que la Oficina del Telescopio Gemini realiza cada año, los responsables australianos organizan un concurso de Astronomía para estudiantes de secundaria en donde se pide estudiar un objeto astronómico y pensar qué podrían aportar nuevas observaciones con el telescopio Gemini Sur para el conocimiento de dicho objeto. El colegio ganador recibe como premio las observaciones astronómicas solicitadas. En la presente edición, el ganador fue un grupo de chicas del colegio “Sydney Girls High School” (barrio de Surry Hills, Sídney, Australia), quienes propusieron realizar nuevas observaciones de NGC 6872. En su proyecto, estas alumnas señalaban que, además de la ciencia que puede proporcionar, la nueva imagen podría tener un gran carácter estético. El resultado es la imagen que tienes en tu pantalla, que incluso fue ayer (3 de abril de 2011) seleccionada como Imagen Astronómica del Día de NASA.

Crédito:

Imagen de la pareja de galaxias interactuantes NGC 6872 (espiral barrada alargada) e IC 4970 (galaxia enana) conseguida usando datos del telescopio de 8 metros Gemini Sur. En concreto, se usaron imágenes en los filtros g‘ (azul), r‘ (verde) e i‘ (rojo) usando el instrumento GMOS. Sydney Girls High School Astronomy Club, Travis Rector (University of Alaska, Anchorage), Ángel R. López-Sánchez (Australian Astronomical Observatory/Macquarie University), and the Australian Gemini Office.  

Más información:

Nota de prensa del observatorio Gemini:
Imagen Astronómica del Día (NASA) 3 de abril de 2011

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El autor

Ángel R. López Sánchez es Licenciado en Física Teórica. Doctor en Astrofísica por la Universidad de La Laguna. Actualmente investiga en el Australian Astronomical Observatory / Macquarie University (Sídney, Australia). Es astrónomo aficionado desde niño y autor del blog de divulgación astronómica "El Lobo Rayado".

Científicos del Imperial College London defienden que hace 4.000 millones de años la Tierra y Marte habrían experimentado un descenso en sus temperaturas que los habría hecho menos acogedores para la vida. Los causantes de esto habrían sido los micrometeoritos, que bombardaron continuamente sus atmósferas durante un período de 100 millones de años denominado en inglés Late Heavy Bombardment (LHB).
Procedentes del cinturón de asteroides existente entre Marte y Júpiter, y restos de la formación del Sistema Solar, su influencia en la temperatura está directamente relacionada con su capacidad para liberar dióxido de sulfuro. Esta “arenilla”, de un tamaño parecido al de un grano de azúcar, cuando penetra en la atmósfera superior de un planeta se calienta hasta unos mil grados centígrados. Produce entonces una serie de gases, entre los que se encuentra el dióxido de sulfuro, bien conocido por formar aerosoles que reflejan la radiación solar y, por tanto, enfrían el planeta.
Este nuevo estudio calcula que se liberaron unas 20 millones de toneladas de dióxido de sulfuro en la atmósfera superior de la Tierra a lo largo de este periodo, y en Marte medio millón.  Para hacer más comprensible este dato, los investigadores ponen como ejemplo un fenómeno reciente: la erupción del Monte Pinatubo en 1991, responsable de la expulsión de 17 millones de toneladas de gases y de que un 10% de la radiación solar no pudiera llegar a la Tierra, lo que hizo descender su temperatura en medio grado centígrado. Los efectos de la lluvia de micrometeoritos serían equivalentes a los que provocaría una erupción anual como la del Pinatubo a lo largo de 100 millones de años. 

Créditos imagen:
El bombardeo de micrometeoritos hace 4.000 millones de años pudo provocar el enfriamiento de los planetas– Imperial College London

Más información:
Sugar-grain sized meteorites rocked the climates of early Earth and Mars, according to new study

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El autor

Annia Domènech es Licenciada en Biología y Periodismo. Periodista científico responsable de la publicación caosyciencia.

Los exoplanetas de Kepler

Ángel Gómez Roldán / 30-03-2011

El telescopio espacial Kepler, en órbita terrestre desde el año 2009, tiene como uno de sus objetivos primarios el buscar planetas parecidos a la Tierra en torno a otras estrellas. No hace mucho los investigadores de la misión hicieron pública una lista de más de 1.200 candidatos a exoplanetas descubiertos por Kepler, entre los que se encuentran varios de tipo terrestre.
Kepler los busca empleando el método del tránsito, esto es, midiendo la débil disminución de la luz de una estrella cuando un planeta cruza por delante de ella. Y, como una imagen vale más que mil palabras, esta ilustración simulada nos muestra con claridad y de un vistazo a todas las estrellas observadas por Kepler con su exoplaneta en tránsito en silueta. Las estrellas se han colocado en orden decreciente de tamaño de arriba a la izquierda a abajo a la derecha, respetándose los diámetros relativos de los discos de estrellas y exoplanetas. La mayor es seis veces más grande que nuestro Sol, mientras que la más pequeña apenas supera un tercio del diámetro solar. Los colores –saturados– de las estrellas representan cómo aparecerían a nuestra vista fuera de la atmósfera terrestre. Como referencia, el Sol junto con Júpiter y la Tierra en tránsito, se encuentran a la derecha, justo debajo de la primera fila. Para poder apreciar que algunas de las estrellas tienen varios planetas en tránsito, ver la imagen en alta resolución (más de 9.600 x 9.600 píxeles, aproximadamente 10 Mb de tamaño) en www.flickr.com/photos/astroguy/5552363328/sizes/o/in/photostream.

Créditos imagen: Los exoplanetas de Kepler… más detalles en el texto. (Jason Rowe, Kepler mission)

Más información: Web de la misión Kepler

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El autor

Ángel Gómez Roldán es Divulgador científico especializado en astronomía y ciencias del espacio, y director de la revista "AstronomíA".