Una red de 19 países europeos ha estudiado durante cinco años, de 2004 a 2009, cómo es posible reducir las emisiones de carbono pensando de nuevo el entorno urbano. Para ello se han analizado diversos casos de implementación de estrategias reductoras de las emisiones tanto a nivel de la ciudad en su conjunto como de los edificios que la integran. Un diseño y un funcionamiento apropiado de los núcleos urbanos pueden contribuir a minimizar el uso de energía y las emisiones de dióxido de carbono. Las conclusiones de esta iniciativa pueden consultarse en el European Carbon Atlas.
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Imagen de la portada del European Carbon Atlas - COST
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Annia Domènech es Licenciada en Biología y Periodismo. Periodista científico responsable de la publicación caosyciencia.